sábado, 17 de enero de 2009

Atónito de un mundo tan familiar y propio..

Mírenlos, mírenme
construyendo esta fábrica radioactiva.
No sé a quien se le pudo ocurrir,
un mundo frenético degradador de valor.
Seguro a la mañana desesperados por relojes correrán,
infinitamente prendida la ciudad por el alumbrar
mientras el arrabal rebalsa de oscuridad abismal.
El amor nace, muere y se hace pesado,
cuando vos intrigas mi mente,
en un inútil intento de vivir sueños de tv...

No hay comentarios: